Retrocede en el tiempo mientras caminas por las ruinas notablemente bien conservadas de Ostia Antica, a menudo llamada una “pequeña Pompeya” a poca distancia de Roma. Fundada en el siglo IV a.C. como un puesto militar, Ostia desempeñó un papel crucial en el control del acceso al río Tíber y la protección de Roma.
Con entradas sin colas y un guía experto, descubre la evolución de la ciudad desde una base naval estratégica hasta un puerto fluvial bullicioso que abastecía a Roma con bienes vitales como el trigo. Maravíllate con su estructura urbana bien planificada, rodeada de muros antiguos y dividida en barrios.
Explora lugares emblemáticos como los Baños Termales de Neptuno con sus intrincados mosaicos, el impresionante teatro, el animado foro, la Casa de Diana y mucho más. Sumérgete en la historia y descubre la vida cotidiana de una próspera colonia romana.